sábado, 29 de octubre de 2016

¿Sabes porque en Venezuela no podemos celebrar Halloween?

Más allá de los patrones culturales que siempre son un problema a la hora de establecer la relación del cómo se forma o transforma una sociedad y con ello una generación, siempre ha entrado en debate la cuestión religiosa y hasta su dosis política a la hora de hablar de la celebración de la fiesta del Halloween.

Si bien es cierto el origen de esta fiesta es celta, y ha sido celebrado originalmente en Irlanda como gratitud al Dios Samhain por las cosechas ( y por ello se emplean alimentos en su celebración como la calabaza – auyama- y dulces), también se le ha hecho la “guerra” en nuestro país con la llegada de la llamada “revolución bolivariana”, por atribuirlo a una celebración estadounidense.

“Durante esa noche se creía que los espíritus de los difuntos caminaban entre los vivos, y se realizaban fiestas y ritos sagrados que incluían la comunicación con los muertos” reseña el portal Muy Historia en un artículo titulado ¿Cuál es el origen de la fiesta deHalloween?.

Ahora bien en lo que a nuestro país respecta, tenemos conmemoración del Día de los fieles difuntos, el Mare-Mare del Akatoompo por el pueblo Kariña. En ambas fechas se aprovecha el día para orar y conectarse espiritualmente con los ancestros, “Se baila mare-mare descalzo para conectarnos con nuestros ancestros y para que ellos sientan que los recordamos”, indican los hermanos de esta etnia.

Por cuestiones políticas o culturales, llámelo por capricho del político de turno o en rechazo a sus enemigos imaginarios, en nuestra tierra no lo celebramos. Así como en Cuba se prohibieron importantes movimientos culturales como El Son, achacándolas al Bloqueo Estadounidense, lo que derivó en la migración de gran parte de sus creadores y cultores, actualmente se nos tiene secuestrado el derecho a la alimentación y hasta la libertad de comprar al exterior lo que necesitemos, gracias a la erradas políticas económicas producto de un ensayo y error, porque según el modelo del actual sistema de gobierno que nos rige es el cubano.  

Nosotros en esta hermosa tierra, con diversidad cultural, amparada en la constitución y que se aplica cuando conviene- para apoyar los rituales de santería, espiritismo, y más a favor del jefe de Estado en cadena nacional si es posible- se critica a quienes celebran el Halloween, y hasta los ofenden.

Actualmente no lo podríamos hacer, porque con tanta gente que sigue en las calles buscando entre la basura restos de alimentos “en buen estado” para alimentarse, capaz que colocamos una auyama en la puerta de nuestra casa y correría la suerte o que te la expropie el gobierno y caiga en mano de los guardias nacionales para entregárselos a su general o sean los venezolanos que andan registrando las bolsas de desechos, quienes se la lleven.

Otro ejemplo sería con los dulces ¿Qué entregar? Si ya una chupeta cuesta Bs 200, tres caramelos a Bs 100 y un barrilete o chakalaca al mismo precio, esto utilizando el baremo de la Metro Bodega ¿Quién dijo yo, pocoyo?.

En cuanto a los disfraces, ya físicamente somos el disfraz de nuestra versión comparado al del año pasado o meses atrás de cuando comenzara “la dieta de Maduro”, cosa que difiero porque generalmente las dietas o cuando sometes a tu cuerpo a un régimen alimentario es para beneficio. A nosotros se nos ha obligado a bajar de peso y si queremos comer debemos rogarle al consejo comunal, si se tiene, a ver cuándo llegará la bolsa del Clap ¿y si no tienes eso? Pues, te quedas sin alimentos en la despensa, te sigues calando la cola, el sol y el maltrato, si no tienes tiempo, sigue aguantando y cómete una auyama.

El truco y trato está regido por los militares y consejos comunales, más otras autoridades, que hacen magia con la comida. La retienen y la desaparecen. "Gorditos y bien bonitos para la rueda de prensa". 

El Halloween ya lo vivimos cierta parte de la población, estamos bajos de peso, por no decir cadavéricos, predecimos como las brujas ¿Qué llegará? Y por si fuera poco uno de nuestros acompañantes más predilectos es la auyama. Mientras las vedetes políticas mediáticas siguen engordando el pueblo se sigue jorobando.


viernes, 21 de octubre de 2016

Las vedetes del burdel mediático venezolano

Quizás deba culpar a mi instinto asesino, que a todos una vez se nos desata, de estar tan indignado a la actual situación país que vivimos, donde las vedetes de la política venezolana (ministros, voceros institucionales y de partidos políticos) se siguen burlando del pueblo y encuentre que la única salida sería una inminente masacre, ejecutada por el pueblo y no por sus opresores. Claro está no sería divertido sin la presencia del actual administrador de este gran burdel, por encontrarse de viaje de "trabajo".

Pese a la crisis socioeconómica en la que nos han sumido una vez más los actores políticos, y no me voy a sumar en una posición o a tomar parte en la guerra. Todos son culpables vivos y muertos, tirios y troyanos, nos engañan con una guerra económica y que para salir de la misma el pueblo una vez más debe salir a votar a un referéndum para revocar al jefe de Estado. ¿Quiénes se quedarían?.

Mientras ellos los de arriba discuten quien se queda con “el coroto”, al pueblo se le ha manipulado su derecho a la alimentación. El que no tenga consejo comunal no come ni se beneficia del CLAP.

Vemos como las vedetes mediáticas en tira y encoje diario culpan uno al otro, al mejor estilo a Tombo y Borondongo sin ofrecer soluciones al pueblo. Ellos engordan y nosotros pasamos hambre.

Instituciones corrompidas, en manos de los burlistas o payasos de oficio quienes esperan las cámaras de los medios pagados por ellos mismo, en algunos casos medios “comunitarios” que no comunican la verdad, para decir “estamos haciendo tal cosa en beneficio del pueblo”, y cuando se dan la media vuelta, en vez de mejorar la cosa se empeora, los cambian en una “movida de mata”, y entre mentadas de madre en cadena nacional hacia el adversario, sigue el Cristo – pueblo, padeciendo.

Insisto como antes expresé, la solución debe ser que el pueblo prepare una verdadera rebelión, sin líderes o al menos quienes les manipulan hoy, un sector por miedo a su cargo o puesto de trabajo se queja pero “sigue la carroza” porque no queda otra y con el adversario no se iría ni en pensamientos. El otro por supuesto, el de promesas incumplidas (por no recibir apoyo u oportunidad), insiste en la denuncia aunque no se le tome en cuenta.

Mientras esto ocurre, alejados ambos sectores uno más que el otro, el principal administrador del burdel mediático inició su viaje de fin de año, en menos de un mes lo ha hecho dos veces. En la Venezuela actual, quienes pueden viajar son lo que ostentan el poder bien sea para hacer promesas al pueblo o hacer lobby internacional mediático.

Algunos agradecen las amargas horas que nos ha tocado vivir a los venezolanos lo cual asumen como “un designio de Dios” y me pregunto yo ¿Dios no ve para los lados cuando un país con todos los recursos potenciales para salir adelante debe depender de la importación?.

Me despido, porque me toca hacer la cola del pan. Como última pregunta estúpida ¿Las vedetes harán cola?.


domingo, 16 de octubre de 2016

Plan de Abastecimiento Complementario ¿A quién beneficia?


Irónicamente a un día de celebrarse el ostentoso “Día Mundial de la Alimentación”, la actual versión de la revolución bolivariana, comandada por Nicolás Maduro y su equipo que no dan pie con bola en derrotar la llamada “guerra económica” fenómeno creado y heredado por ellos mismo, y lanzan un “Plan de Abastecimiento Complementario” (PAC).

La medida, se suma a los ya recordados programas que vienen sumando más que soluciones, descontento en la población, he de mencionar y recordar Órgano Superior de la Defensa de la Economía (noviembre 2013), Plan mata-cola (agosto 2014), y el más reciente la Gran Misión Abastecimiento Soberano (julio 2016). En todos no se mencionan resultados concretos, todos un cúmulo de ensayo y error de la economía, creación de instituciones donde el pueblo es quien paga y sigue pasando hambre (una de las peores épocas recordadas por los mayores).

A pesar de la monopolización estadista de los medios de comunicación a favor del gobierno donde se suman, nacionales, comunitarios y alternativos (estos dos últimos por la concesión no realizan la autocrítica justa y necesaria legada por el Comandante Chávez), el pueblo sabe perfectamente cuál es su situación, y más allá de alegrarse por cuanto operativo quieran lanzar y aumento de sueldo, sabe que es puro “pote de humo” para no resolver el verdadero problema.

Todos los programas de gobierno antes mencionados en teoría eran y son – como el actual Abastecimiento Soberano- para garantizar el acceso oportuno a bienes y servicios. Hoy sabemos que no se ha cumplido sostenidamente, solamente cuando están las autoridades para el show mediático y listo.

Y hablando de derechos y leyes de las cuales la llamada revolución bolivariana se jacta en cumplir, que dice la Ley Orgánica De Seguridad ySoberanía Agroalimentaria  en su exposición de motivos  

“Para la construcción del Estado Social de justicia y bienestar
que enuncia la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela, es indispensable garantizar a las ciudadanas y los
ciudadanos venezolanos el acceso oportuno a alimentos de
calidad, en cantidad suficiente, con preferencia de aquellos
producidos en el país(…)”

Y qué decir de la Ley Orgánica de Precios Justos (modificada hasta tres veces) que está diseñada justamente para garantizar no solo el acceso, si no como su nombre lo indica, el precio justo de los bienes que aquí se vendan.

Mucho se ofendió al pueblo colombiano por parte de un presidente con ancestros neogranadinos, por no decir otra cosa, y hasta acusarlos de delincuentes y bachaqueros. Se ha negado enérgicamente una ayuda humanitaria que incluya alimentos y medicinas. Con el PAC no están descubriendo el agua tibia, puesto que prefirieron al no poder incapazmente comprobado el producir, importar alimentos y artículos de higiene quien sabe a qué costo para venderlos a precios exorbitantes, ya desde hacía meses en los estados Anzoátegui, Bolívar, Táchira y Zulia se veían productos colombianos y brasileños.  

Haciendo una lista para un mercado de una semana para una familia promedio de cuatro personas, en las que incluyo aceite de maíz, 2 kilos de arroz, 2 kilos de harina de maíz, mantequilla, un kilo de pasta larga, salsa de tomate, mayonesa, crema Colgate, jabón de baño, lavaplatos, detergente y un desodorante suma la cuenta a Bs 24.940 según los precios publicados por el portal de LaIguana en horas de la tarde de este domingo.

Esto sin incluir legumbres, ni pollo o carne. Proteínas necesarias para alcanzar la semana abastecido. Si calculamos que esta familia promedio debe cancelar los servicios y un alquiler de vivienda ¿Qué hace?, si el sueldo mínimo está en Bs 22.576,60.

¿A dónde nos quieren llevar? ¿Por qué se burlan? Mientras el pueblo sigue hurgando entre la basura que comer, porque según el palangrista rojo de VTV dice que en la cuarta república comía la población venezolana “perrarina”, hoy en día come basura y es la quinta. Y ni hablar de la efectividad de los CLAP nacidos en este año 2016. 

Mientras ellos, los de arriba engordan, e increpo directamente al gobierno madurista, porque sabemos que la llamada derecha no tiene un proyecto sustentable que nos ayude a salir inmediatamente de esta crisis, y menos la tendría ante el desastre gigante que tenemos; nosotros los de abajo seguimos haciendo cola y viendo los toros desde la barrera esperando a que las cosas mejoren, leyendo de programas y viendo a los voceros de turno montar su show.

Ahora bien la política del "exprópiese" ha sido factor fundamental del declive, a pesar de haber realizado inspecciones a las empresas privadas se encontró en su mayoría falta de materia prima y condiciones adecuadas para la producción, ciertas fueron las que persistían el ataque económico.



sábado, 1 de octubre de 2016

La lluvia en la habitación

Se encontraba solo en su habitación a un lado de la cama, vestido con ropa de casa, un par de calcetines del mismo color que su oscura camisa, un pantalón largo y una cobija gruesa que le envolvía.



De a sorbos tomaba el té caliente de hierbas aromáticas que preparó para aquella tarde entre él y la lectura de su libro, vaya que habían pasado varias horas al menos entre ellos. El navegar de páginas ya alcanzaba la mitad de su grosor.

Afuera caía la lluvia de octubre,llegó para odiosamente hacer su tarea natural de refrescar, para él no era complicación, tenía ya días encerrado pensando y tratando de unir las piezas para el artículo que preparaba.

Incesantemente sus pensamientos le asaltaban, entonces tomaba su computadora y retomaba su palabrera, como si fueran pájaros revoloteando, encerrados, pero libres. Indistintamente en el tiempo en que lo escribiera, se unificaban las ideas. Entonces volvía a tomar otro sorbo de la dulce infusión, las gotas caían suavemente.

Se encontraba entonces consigo mismo, tal vez huyendo de sí. Caía la noche y ya las hojas a navegar eran cada vez menos, caminaría a la cocina a preparar algo de comer, y volvería a la habitación. Su interés no estaba afuera precisamente.

Llegó la noche, y su manto ya arropa la ciudad,  no hay lluvia solo el clima frío. Él continúa en su habitación, esta vez ha encendido la televisión para ver las noticias. La luz del artefacto inerte ocupa toda la habitación.

Pasan las horas, y piensa que al artículo, ya le falta poco para ser entregado. Mañana será otro día y lo envío, se dice para sus adentros y apaga la televisión.


El reloj marca las 12:30 de la media noche y vuelve la lluvia a la ciudad, como gotas son sus pensamientos, aunque duerma, es así mañana será otro día.