lunes, 5 de marzo de 2012

La fidelidad...

Con el perdón de todos mis hermanos peludos, pero no encontré un mejor comportamiento para comparar entre la fidelidad de sentimiento y verdadero amor, a la interpuesta mediante el "lavado cerebral" y la fidelidad al puesto de trabajo. 



De como se cría y se logra tener la fidelidad de un perro es fácil, sólo debes colocarle agua, comida, y un buen aseo, eso sí ser cariñoso con él y decirle que lo quieres. No decirle que no lo quieres, no regañarlo en público, no ponerlo en vergüenza, en fin es fascinante.

Cuando le coloques la comida demuéstrale que fuiste tú quien lo hizo, y si es posible repítele que fuiste quien le trajo comida, y si no lo reconoce, pues, raciónala, verás que te obedecerá y defenderá la medida, después de todo eres su Padre, Salvador, Amo y Dueño Absoluto, así lo ve, así se lo has enseñado.

En cuanto al agua, le puedes dar toda la que quieras, eso sí cuando no le llegue el agua a su "perol" hazle entender que no es culpa tuya, es por detalles técnicos que no tendrás que explicar, después de todo es su fidelidad y voto de confianza que buscas.

¿Que donde dormirá? sólo ponle cartón, una casa de cartón y será feliz, demuéstrale que tu lo hiciste por él, y no porque no lo quieras al contrario.

Y por último llámalo y que sienta que eres su Salvador, que te lo agradezca  verdaderamente que mueva su cola y que gruña cuando otros hablen mal de ti, si tiene que morder que lo haga solo por ti y en tu nombre.

Si es el caso que es callejero, recuerdale como vivía antes y como vive ahora, y lo más importante ¿que sería de él sin ti?.

Cualquier parecido a la realidad es pura política...



 

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